El Pan de Muerto Vegano: Una Tradición Reinventada con Amor
Hoy quiero compartir contigo algo que me encanta y que, sinceramente, es de mis tradiciones favoritas: el pan de muerto. Este pan, con su aroma y sabor inconfundibles, ha sido parte de las celebraciones mexicanas durante generaciones. Pero, ¿qué pasa cuando decides adoptar un estilo de vida vegano? ¿Significa renunciar a estas delicias?
Cuando adopté el veganismo, me propuse un reto: comer igual o incluso más rico, sin dejar de lado esos platillos que forman parte de mi cultura y tradición. Y, aunque a veces es más difícil sustituir ingredientes para hacer una receta vegana, especialmente con los panes y postres, no me di por vencida. En las panaderías o restaurantes veganos, rara vez encontraba postres y panes dulces que realmente me satisfacían. Esa fue mi motivación para embarcarme en esta aventura culinaria.
Después de muchísima prueba y error, probando diferentes sustituciones y ajustando las proporciones, finalmente logré una receta que me llenó de orgullo. Quería que el sabor y la textura fueran simplemente increíbles, y vaya que lo logré. Por eso, con todo mi cariño, te comparto esta receta. 💚
Sí, ¡lo leíste bien! Esta delicia tradicional mexicana, que es el alma de las celebraciones del Día de los Muertos, ahora tiene su versión 100% libre de ingredientes de origen animal. La primera vez que probé el pan de muerto tradicional, quedé hechizada por su sabor y textura. Pero, como muchos de ustedes, me preguntaba: «¿Cómo puedo disfrutar de esta maravilla sin comprometer mis valores veganos?». Y así, me sumergí en la aventura de reinventar esta receta.
Ahora, sé que podrías estar pensando: «¿Y qué pasa con el sabor?». ¡No temas! El pan de muerto vegano conserva ese saborcito cálido y reconfortante que todos amamos. Y, para ser honesta, me siento aún más conectada con esta tradición al saber que mi versión respeta la vida de todos los seres.
Uno de los ingredientes que suele generar dudas es el aquafaba, que reemplaza a los huevos en esta receta. Aunque suena un poco exótico, es muy fácil de obtener. Es simplemente el líquido en el que se han cocido los garbanzos. También puedes obtenerlo de una lata de garbanzos. Este ingrediente es esencial para darle esa textura y humedad al pan que tanto amamos. Y sí, sé que al principio puede oler un poco diferente, pero te prometo que ese aroma no se quedará en tu pan.
Uno de mis ingredientes favoritos de esta receta es el agua de azahar. Aporta un toque único al pan, con un aroma cítrico mezclado con notas florales, que invade toda la casa al momento de hornear. Es simplemente mágico.
Algo que de verdad me encanta de hacer mi propio pan es el olor que deja en toda mi casa. Es como un abrazo cálido que te envuelve. Y cuando finalmente lo pruebas, después de todo el esfuerzo y la espera, es como un regalo para el alma. Vale totalmente la pena.
Recuerdo la primera vez que compartí este pan con amigos y familiares. Sus caras de sorpresa al descubrir que era vegano… ¡no tiene precio! Y es que, al final del día, lo que más me apasiona es demostrar que la comida vegana puede ser tan rica y tradicional como cualquier otra.
Así que, si estás buscando una forma de celebrar el Día de los Muertos de manera consciente y deliciosa, te invito a probar esta receta. Y si ya la has hecho, ¡cuéntame tu experiencia! Juntos, haremos que la comida vegana sea una fiesta para el paladar y el corazón. 💚🍞🌼
¡Hasta la próxima receta, queridos amigos veganos! ¡Y que viva la tradición! 🎉
Pan de Muerto Vegano
Equipo
- Báscula
- Tazón
- Cucharas medidoras
- Horno
- Cuchara para mezclar
- Rallador de agujeros pequeños
Ingredientes
- rallladura de 1 naranja madura
- 200 gr leche de soya sin sabor y sin azúcar
- 10 gr de levadura seca o 1 cda si tu báscula no mide tan poquito o 1 sobre de 11 gr.
- 120 gr azúcar blanca
- 2 cditas agua de azahar o 1 cdita si es esencia artificial o vainilla
- 9 cdas aquafaba agua de cocción de los garbanzos
- 150 gr aceite de coco refinado sin sabor y olor
- 600 gr harina blanca de todo uso
- 1/8 cdita de sal (yo uso la cdita de 1/4 y la lleno a la mitad)
- Un poco de leche de soya para barnizar
- Un poco de aceite de coco sin sabor para engrasar y barnizar el pan
Elaboración paso a paso
- Saca la ralladura de la naranja usando un rallador de agujeros pequeños, ten cuidado de no rallar hast ala parte blanca, ya que se te puede amargar el pan. Si algunos trozos de la ralladura están muy largos corta un poco para que se incorporen bien a la masa.
- En una olla pequeña mide la leche de soya y calienta brevemente para atemperar la leche y que no esté fría del refri. No debe estar caliente porque puedes matar a la levadura.
- Agrega la levadura y mezcla bien.
- Agrega el azúcar, aquafaba y aceite de coco y mezcla muy bien.
- Agrega el harina y la sal y comienz a incorporar los ingredientes con una cuchara dentro del tazón.
- Continúa incorporando la masa con las manos dentro del tazón, una vez que todo esté incorporado, pasa la masa a tu mesa de trabajo.
- La masa va a estar muy pegajosa, así es ella…no le agregues más harina. Va a mejorar conforme la amases.
- Amasa usando dobleces y cuando puedas, levanta la masa y golpeala sobre la mesa y haz un doblez. Poco a poco verás como se despega de la mesa y de tus manos hasta tener una masa que se ve a lisa de la superficie y que puedas hace la prueba de la ventana.
- Pon la masa en un tazón ligeramente engrasado, engrasa un poco la superficie de la masa para que no se seque y tapa con un plástico film.
- Reposa la masa en un lugar templado hasta que duplique su tamaño (aprox una hora).
- Saca la masa del tazón y amasa durante 1 minuto para sacar las burbujas muy grandes de la masa
- Engrasa una charola para hornear.
- Separa la masa en la cantidad de panes que quieres. A mi me gusta separar en dos.
- De cada parte de tu masa, separa 1/4.
- Con la parte grande que resta de masa, has una bolita tensando la superficie jalando la masa hacia ti hasta tener una bolita lisa y firme. Pasa a la charola para cocina, presiona levemente el pan y haz una cruz usando un poco de leche de soya.
- Al 1/4 que separaste, agrega un poquito de harina (un poco menos de 1 cdita) y amasa hasta que se incorpore. Esto ayuda a secar un poco la masa y que los huesitos no se fusionen con el resto del pan.
- Separa esta parte de la masa en 3, un parte más pequeña que las otras dos (para la cabeza)
- Para dar forma a los huesitos estira cada uno de los pedazos más grandes en tiras y da forma usando tres dedos.
- Para dar forma a la cabeza toma el pedacito restante de masa y haz una bolita envolviendo hacia dentro y luego da un pellizco en la parte de abajo.
- Coloca los huesitos formando una cruz, presiona el centro ligeramente para hacer espacio para la bolia de la cabeza, barniza con un poquito de leche y coloca la cabeza en el centro.
- Barniza todo el pan con un poquito de leche de soya.
- Repite lo anterior para cada pedazo de masa que hayas separado.
- Coloca tu masa suficientemente separada en tu charola para permitir que los panes se expandan sin que se toquen
- Tapa con un trapito limpio y deja fermentar hasta que dupliquen su tamaño (aprox 1 hora)
- Cuando te falten 20-30 mins para que termine la fermentación, precaliente el horno a 180°C
- Hornea el pan por aproximadamente 20 mins o hasta que esté dorado. El tiempo puede variar dependiendo del tamaño de tus panes. Cuando hago un solo pan grande con esta receta me tarda aprox 35-40 mins.
- Deja enfriar 20 mins
- Barniza completamente los panes con aceite de coco y espolvorea todo el pan con azúcar.
- Disfruta con un chocolatito caliente.
Notas
- Si consigues harina de pan de fuerza o de alta proteína tus pan de muerto quedará aún mejor.
- El agua de azahar se consigue en tiendas de comida árabe. La esencia artificial la consigues en algunos súpers o en tiendas de materias primas para panadería.
- La levadura que se usa para esta receta debe ser levadura de pan. Las levaduras químicas como el Royal o similares, no funcionan.
- Si no confías en la temperatura de tu horno, te recomiendo que adquieras un termómetro de horno, son muy baratos y en mi cocina ha hecho una gran diferencia.